lunes, 13 de febrero de 2012

'Cuentos que acaban mal' de Géza Csáth



Estaba escrito que, con un título como ‘Cuentos que acaban mal’, servidora tenía que acabar leyendo este libro tarde o temprano. Ciertamente el libro da lo que este título promete; se trata de cuentos breves y oscuros, sobre temas como el mal, la muerte, la crueldad, el sufrimiento. A veces me da la sensación que este húngaro es una especie de mezcla entre Edgar Allan Poe y Franz Kafka. Sus cuentos siempre son angustiantes y en ocasiones terroríficos. Y se nota que Géza Csáth sabe de lo que habla. Reconozco que es fácil decir esto sabiendo lo mal que terminó su vida, pero es cierto: se nota que Csáth sabe de lo que habla, cosa que hace estos cuentos doblemente escalofriantes.

Cuando digo que la historia de Géza Csáth terminó muy mal no lo digo por decir, no estoy exagerando. Él era un joven prodigio, psiquiatra y escritor, amigo de Dezsó Kostolányi, y en principio no le faltaba de nada y derrochaba talento, pero se volvió adicto a la morfina y acabó suicidándose a los 32 años, después de asesinar a su esposa. En sus cuentos, el mal es una entidad abstracta y misteriosa, pero muy real, que viene de fuera y que se acaba instalando dentro de nosotros. Es un silencio negro que se acerca amenazador, una rana grande y peluda que es indicio de mal agüero, un miedo que nos despierta por la noche y ya no nos deja volver a dormir, un jardín exuberante que puede que esconda secretos macabros. Un tipo especial del mal es el que practican los niños como si fuera algo totalmente inocente, esa crueldad disfrazada de juego, y probablemente los cuentos que hablan de este mal sean los más brutales.

Luego está la muerte. Hay un cuento sobre un hijo que tiene que ir a recuperar el cadáver de su padre que ha sido entregado a la ciencia, el de un colegial al que la muerte viene a buscar, el de un mago que es espectador de su propio velatorio, el de dos celadores que arreglan el cadáver de un condecorado militar, el de un joven que persigue a una quimera y encuentra la muerte, etc. Y, aún así, probablemente uno de los cuentos más duros sea el de unos músicos que llegan a una ciudad de provincias donde lo último que se aprecia es el arte en general y la música en particular. Probablemente sea el más duro porque habla de las desilusiones y los sinsabores de la vida, de renunciar a los sueños y verse obligado a asentarse en la mediocridad. Todos los cuentos son demoledores, pero probablemente éste es el que me lo ha parecido más, sencillamente porque es el que me es más cercano y, por eso, el más terrible.

Enlace
  • 'La pequeña Emma', cuento íntegro y traducido de Géza Csáth, brutal y magnífico; por tanto, un perfecto representante del estilo de este húngaro.

10 comentarios:

La mujer Quijote dijo...

En una ocasión leí que este autor reunía la crueldad de Agota Kristof y al amargura de Kosztolanyi, en ese momento fue un objetivo conseguir este volumen. Tardé mucho en encontrarlo (tuvo que ser en un viaje a Madrid, las librerías de mi ciudad ni siquiera conocían la editorial, en fin).
Mis preferidos son "la pequeña Emma" y "matricidio", tal vez porque la crueldad infantil es la peor de todas (por eso me gustó mucho Kristof, aunque a ti no te entusiasmó precisamente).
Tengo algunos puestos en el blog.

Núria dijo...

No, mi primer contacto con Kristof no fue muy satisfactorio. Pero algún día la retomaré para ver si me produce una mejor impresión. Por cierto, ¿has leído los diarios de Géza Csáth? Creo que es el otro único libro de Csáth que está traducido, ¿no? Y yo después de estos relatos me hequedado con ganas de más y seguro que acabaré comprándolo.

Éste lo compré a través de la Casadellibro en Internet. Es que vivo en un pueblo pequeño y la única librería que tenemos deja bastante a desear. Así que la mayoría de veces acabo satisfaciendo mi necesidad de libros a través de Internet.

Entre mis preferidos, además de los'Músicos, también está La pequeña Emma. Matricidio me gusta pero probablemente con éste tengo el mismo problema que con Kristof. A ver, en La pequeña Emma los niños son niños normales, como lo era yo, y aún así son capaces de cometer crueldades y me resulta creíble. En cambio, los de Matricidio son tan malos ya de nacimiento que me cuesta un poco creerlos; que me retraten el mal por el mal no me interesa demasiado, me interesa más que me expliquen que el mal está en todos nosotros, también dentro de los que parecen más normales.

No había visto que tenías cuentos de Csáth en tu blog. Con tu permiso, te voy a enlazar.

La mujer Quijote dijo...

No, no he leído los diarios, sé que están traducidos pero nunca los he visto en ningún sitio.
Yo vivo en una ciudad universitaria y sus librerías dejan mucho que desear, así que me imagino la situación en un pueblo pequeño (aunque a veces hay sorpresas).
Yo tengo una visión diferente de lso niños de Kristof, no los veo como malvados, simplemente carecen de algunos sentimientos, son fríos. Los veo más como esos asesinos profesionales de las películas, esos que te dicen "no hay nada personal, sin resentimientos" y te pegan dos tiros. Sin embargo esos que parecen normales ... Claro que estos últimos son los que más miedo dan.
Por cierto, también tengo algún cuento de Kristof, por si te apetece darle una oportunidad como cuentista.
Un saludo

Lady Sparrow dijo...

Lo sumo a mi lista de libros pendientes. Últimamente lo que más leo son libros de relatos, te recomiendo "Siete pecados capitales" de Milorad Pavić, este escritor tiene la capacidad de hacer que creas que estás dentro de un sueño. Y, cómo no, los "Nueve cuentos" de Salinger, a cuál más desconcertante.

Me ha gustado mucho tu blog, te sigo. :)

Lady Sparrow dijo...

Por cierto, he ojeado tu otro blog, sobre David Foster Wallace. Así que aprovecho para preguntarte... yo no he leído nada de él, pero hace tiempo me llamó muchísimo la atención el título "La niña del pelo raro" y está en mi lista para futuras adquisiciones. Pero, ya que tú conoces a fondo su obra, ¿me recomiendas empezar por ése o por algún otro? :)

Núria dijo...

Mujer Quijote, tienes razón, los niños de Kristof más que malos, lo que les pasa es que son incapaces de sentimientos de empatía. Aún así, me cuesta más créermelos. Es verdad que los que parecen normales y luego son capaces de cometer actos de lo más atroces son aún más escalofríantes, pero se me hacen más creíbles. Supongo que es un problema mío personal.

nUhN, gracias. Soy fan de los Nueve Cuentos de Salinger. En mi lista de cuentos preferidos de toda la historia seguro que entrarían dos o tres de Salinger.

A Milorad Pavić no lo conozco, pero me apunto tu recomendación. Gracias, siempre me encanta descubrir escritores nuevos y más si son de literaturas no muy "comerciales".

Sobre DFW, a mí 'La niña del pelo raro' me parece un libro algo durillo para empezar con este autor. Tiene unos cuantos cuentos geniales, pero luego hay otros que son quizás demasiado postmodernistas (al menos para mi gusto). Quizás si estás acostumbrado a leer Pynchon, Barth y cosas así sea más fácil que te guste, no sé.

Yo para empezar con DFW siempre suelo recomendar 'Entrevistas breves con hombres repulsivos'. Me parece el más "accesible" de DFW, pero a la vez también es más regular que La niña del pelo raro (en el sentido de que no hay ningún cuento de las Entrevistas que me parezca flojillo o regulero), y también tiene más profundidad y más miga. No sé, siempre me da la sensación que es más DFW. Para mí, se nota que 'La niña del pelo raro' es del principio de su carrera y aún no tenía acabado de definir su estilo y para dónde quería tirar.

La mujer Quijote dijo...

Los de Kristoff no te resultan creíbles, pero como te comenté cuando reseñaste "el gran cuaderno", si lees las dos partes que te quedan tal vez te resulten más creíbles, que no significa que te vaya a gustar más.

Lady Sparrow dijo...

Ok, empezaré por ése. Ya que mi economía no está muy bien y encima acabo de comprar una edición especial de todo Salinger y los cuentos de Chéjov (precisamente buscando una reseña llegué a tu blog), este mes tengo cubierto el cupo, así que tendrá que esperar un poco.
¡Tu blog es un problema! Ya llevo tres apuntados y además acabo de ver el recuento de 2011... Esto no puede ser. XD

Núria dijo...

Mujer Quijote, promete solemnemente seguir leyendo la trilogía de Claus y Lucas. No sé cuándo será, pero lo voy a hacer. De verdad.

nUhN, ya me hace ilusión que hayas llegado hasta mi blog, pero me hace doblemente ilusión que hayas llegado a él a través de Chejov, porque siempre será uno de mis más favoritos. Me alegra que mi blog te anime a probar lecturas que yo he disfrutado. Y bueno, el problema de tener apuntados "demasiados" libros para leer creo que lo tenemos todos los que leemos :D

Lady Sparrow dijo...

:)